Mercedes apuesta por la pila de combustible para sus eléctricos
La pila de combustible forma parte de la estrategia de propulsiones de Daimler. Mercedes-Benz ha acumulado experiencia en el campo de la propulsión por hidrógeno gracias al desarrollo de varias generaciones de vehículos. Hasta la fecha las más de 300 unidades que conforman el parque de vehículos con pila de combustible desarrollados por Daimler, incluyendo los vehículos de desarrollo, han recorrido casi 18 millones de kilómetros.
La nueva generación de vehículos de pila de combustible de Mercedes-Benz se basará en el desarrollo que se está llevando a cabo sobre el GLC F-CELL. Se trata de un vehículo cercano a la producción y será presentado por primera vez en el Salón de Frankfurt (IAA) en septiembre de 2017. Combina las tecnologías de pila de combustible con la de híbrido enchufable. Con él, Daimler enfatiza su liderazgo en tecnología enmarcada en su estrategia CASE: conectado a la red (Conected), conducción autónoma (Autonomous), flexibilidad de uso (Shared & Services) y conducción eléctrica (Electric).
Una vez que se construyeron los primeros prototipos aptos para circular, comenzaron las pruebas de verano e invierno en carretera con el GLC F-CELL. Los vehículos fueron conducidos por los terrenos de pruebas en España (IDIADA, cerca de Barcelona), Suecia (Arjeplog) y Alemania (Boxberg) entre otros. Las pruebas de carretera también se desarrollaron en Sierra Nevada, las sierras bajas de Schwäbische y en el Selva Negra en Alemania. El programa de pruebas incluyó más de 500 ensayos individuales, adicionales a los estándar a los que se someten todos los vehículos e incluyeron pruebas específicas sobre el sistema de propulsión eléctrico, la pila de combustible y la interacción de los componentes de la cadena cinemática.
Los tanques de hidrógeno están instalados entre los ejes del vehículo, una zona segura ante posibles colisiones y protegida por una estructura adicional que los envuelve. En caso de impacto, entran en juego una serie de medidas adicionales como un sistema de válvula multifase o circuitos de protección especiales para el sistema de alta tensión. Los ensayos de choque realizados con el GLC F-CELL y con los anteriores modelos de hidrógeno muestran que los ingenieros han conseguido un nivel de seguridad equiparable al de los vehículos convencionales. Como resultado, la última generación de F-CELL cumple con requerimientos legales e incluso con los estándares internos más estrictos de Mercedes-Benz.
Redacción de Electromovilidad con N.P. (Fuente: Mercedes)